Tendinitis de los aductores. Consejos para prevenirla y superarla.

¿Qué es la tendinitis de los aductores?

La tendinitis de los aductores es una afección que se produce por la inflamación de los tendones de los músculos aductores, ubicados en la cara interna del muslo. Es una lesión frecuente en deportistas y personas que realizan movimientos repetitivos de la cadera, como corredores, futbolistas y tenistas. También puede desarrollarse debido a movimientos bruscos, traumatismos repetitivos o desequilibrios musculares.

Para entender la tendinitis de los aductores y cómo se produce, es fundamental conocer la anatomía y función del grupo muscular de los aductores que está compuesto por cinco músculos principales: Aductor largo, Aductor corto, Grácil, Aductor mayor y Pectíneo.

Estos músculos tienen su origen en diferentes partes de la rama inferior del pubis y se insertan a lo largo de la línea áspera del fémur. En el caso del aductor mayor, su inserción se extiende hasta el cóndilo femoral interno.

Los músculos aductores no trabajan solos, sino que están conectados con otros grupos musculares que influyen en el equilibrio y la coordinación. En especial, es importante considerar:

  • Los propios aductores, especialmente su parte inferior, que se inserta en el fémur y la tibia.
  • Los músculos pélvicos profundos, como el obturador externo y el piriforme, que estabilizan la cadera.
  • El core (abdominales y oblicuos) que, aunque no se conectan directamente con los aductores, ayudan a mantener una postura estable y evitar desbalances musculares.»

Quizás todo esto suena muy técnico, pero es importante que te des cuenta de ello para que sepas cómo prevenir esta lesión. Sigue estos consejos prácticos:

  • No te centres solo en los aductores, trabaja todo el sistema. No basta con estirar y fortalecer solo los músculos aductores; es importante incluir ejercicios para la pelvis y el core para mejorar la estabilidad y prevenir lesiones.
  • Refuerza la estabilidad de la cadera. Incluir ejercicios para los músculos pélvicos profundos (como el piriforme y los glúteos profundos) puede mejorar la coordinación y reducir el riesgo de sobrecarga en los aductores.
  • Fortalece el core para evitar desequilibrios. Un abdomen fuerte (especialmente el transverso y los oblicuos) ayuda a distribuir mejor la carga en la cadera y piernas, evitando que los aductores trabajen en exceso.

Síntomas de la tendinitis de los aductores

La tendinitis de los aductores puede manifestarse de forma variada según la actividad física del paciente y la gravedad de la lesión. Sin embargo, existen síntomas característicos que permiten identificarla desde sus primeras fases:

  • Dolor en la ingle o cara interna del muslo: Es el síntoma más común. Puede empezar como una molestia leve y volverse más intenso con el movimiento, especialmente al correr, girar o abrir las piernas. En algunos casos, el dolor se siente en la unión del músculo con el hueso del pubis y puede doler incluso al tocar la zona.
  • Sensación de tensión o sobrecarga: Los músculos aductores pueden sentirse rígidos o muy tensos, lo que dificulta actividades como caminar, subir escaleras o hacer ejercicio. Este malestar puede extenderse desde la ingle hasta la parte interna del muslo.
  • Inflamación y moratones en casos más graves: Si hay una lesión importante, como un desgarro muscular, pueden aparecer hinchazón, enrojecimiento o hematomas. Esto suele ir acompañado de dolor intenso y dificultad para mover la pierna con normalidad.

Estos síntomas suelen manifestarse en la fase aguda de la lesión, es decir, en sus primeras etapas. Si no se trata adecuadamente, la tendinitis puede hacerse crónica, provocando dolor persistente y afectando la calidad de vida del paciente.

Escucha a tu cuerpo y no ignores el dolor. Si sientes molestias en la ingle o en el muslo interno, puede ser señal de una sobrecarga o un desequilibrio muscular que necesita ser corregido con ejercicios adecuados o fisioterapia para evitar complicaciones a largo plazo.

Causas de la tendinitis de aductores

Entre las principales causas de la tendinitis de aductores están:

  1. Sobrecarga muscular por sobreentrenamiento
    • Es la causa más común, especialmente en corredores y deportistas que entrenan en terrenos resbaladizos, como en el cross, trail running, o en deportes con cambios bruscos de dirección como el tenis, pádel, baloncesto, fútbol sala o rugby.
    • La repetición constante de movimientos de alta exigencia genera una sobrecarga en los tendones de los aductores, provocando inflamación y dolor.
  2. Movimientos forzados y repetitivos
    • La repetición excesiva de la zancada en máxima amplitud puede llevar a una sobrecarga en los aductores. Esto ocurre tanto en los deportes mencionados como en entrenamientos en el gimnasio que incluyen zancadas con peso.
  3. Movimientos bruscos y distensiones
    • Una apertura repentina de la pierna puede causar una distensión en las fibras musculares y tendinosas, e incluso generar una rotura de fibras en los músculos aductores.
  4. Desequilibrio muscular
    • Un desajuste entre los abductores (glúteos), la musculatura del suelo pélvico o los músculos abdominales respecto a los aductores puede generar una distribución inadecuada de la carga y aumentar el riesgo de lesión.
    • Si los abdominales son más débiles que los aductores o si los glúteos tienen mayor fuerza que estos, se crea una descompensación que afecta el equilibrio de la cadera y la estabilidad del pubis.
  5. Factores anatómicos no corregidos
    • Alteraciones como una diferencia en la longitud de las piernas pueden provocar una distribución desigual de las cargas y generar estrés prolongado en la musculatura aductora, favoreciendo la aparición de la lesión.

Tendinitis de aductores crónica.

Cuando la tendinitis de los aductores no se trata adecuadamente o se mantiene una sobrecarga muscular prolongada, la lesión puede volverse crónica. Esto ocurre cuando el dolor persiste durante más de 12 semanas, según la bibliografía científica actual.

Causas de la tendinitis de aductores crónica

La evolución hacia una tendinitis crónica suele estar relacionada con:

  • Sobrecarga muscular no tratada, que mantiene la inflamación de los tendones.
  • Desequilibrios musculares, especialmente cuando los aductores son más débiles en comparación con otros grupos musculares como los glúteos, el core o el suelo pélvico.
  • Falta de períodos de descanso, lo que impide la adecuada recuperación muscular y aumenta la fatiga.

Consecuencias de la tendinitis crónica

A medida que la lesión se agrava y persiste en el tiempo, pueden surgir complicaciones como:

  1. Irritación e inflamación de la sínfisis del pubis
    • La afectación prolongada de los aductores puede generar una pubalgia, provocando dolor e inflamación en la articulación del pubis.
  2. Alteraciones musculares y biomecánicas
    • La disfunción en los aductores puede repercutir en otros grupos musculares, como el suelo pélvico y los abdominales, afectando la estabilidad de la pelvis.
    • En casos avanzados, la biomecánica de la marcha se ve alterada, lo que puede llevar a la necesidad de correcciones posturales, como el uso de plantillas ortopédicas.

El tratamiento de la tendinitis de los aductores según el método de Clínicas H3

El tratamiento de la tendinitis de los aductores en Clínicas H3 se basa en un enfoque integral que combina diagnóstico preciso, fisioterapia avanzada y rehabilitación personalizada para asegurar una recuperación completa y prevenir recaídas.

1. Diagnóstico y Evaluación

El primer paso es hacer una evaluación detallada al paciente para entender el origen del dolor, su historial médico y cualquier factor que pueda estar contribuyendo al problema. A continuación, se lleva a cabo una exploración física para determinar el grado de afectación. En casos necesarios, se utiliza la ecografía para visualizar el estado del tendón y planificar mejor el tratamiento.

2. Tratamiento Fisioterapéutico Personalizado

Dependiendo de la fase de la lesión, se aplican diversas técnicas fisioterapéuticas:

  • Terapia manual para liberar tensión muscular y mejorar la circulación.
  • Electrólisis percutánea (EPI/EPTE), un tratamiento ecoguiado para regenerar el tendón dañado.
  • Ondas de choque para estimular la reparación del tejido y reducir la inflamación.
  • Diatermia y neuromodulación para potenciar la recuperación mediante el aumento del flujo sanguíneo y el alivio del dolor.
  • Corrección biomecánica a través del estudio de la pisada y, si es necesario, uso de plantillas ortopédicas.

3. Ejercicios de Rehabilitación y Reeducación Funcional

Una parte esencial del tratamiento es la readaptación progresiva del paciente a su actividad diaria y deportiva:

  • Ejercicios de movilidad y fortalecimiento para recuperar el equilibrio muscular entre aductores, glúteos y core.
  • Estiramientos progresivos para mejorar la flexibilidad y evitar rigideces.
  • Entrenamiento de propiocepción para fortalecer la estabilidad pélvica y prevenir recaídas.
  • Plan de retorno a la actividad supervisado, que incluye ejercicios específicos para cada tipo de paciente.

4. Aplicación de Frío y Calor

Dependiendo de la fase de la lesión, se recomienda:

  • Frío en las primeras 48-72 horas para reducir la inflamación.
  • Calor en fases subagudas y crónicas para mejorar la vascularización y relajar la musculatura.

5. Seguimiento y Prevención

El tratamiento en Clínicas H3 no solo busca aliviar el dolor, sino también prevenir futuras lesiones. Se realiza un seguimiento continuo mediante evaluaciones periódicas con ecografía para comprobar la evolución del tendón y ajustar el plan de tratamiento si es necesario. Además, se diseñan estrategias de prevención personalizadas para evitar recaídas y optimizar el rendimiento físico del paciente.

Con este enfoque multidisciplinar, Clínicas H3 garantiza una recuperación efectiva y duradera de la tendinitis de los aductores, ayudando a los pacientes a volver a sus actividades diarias y deportivas sin limitaciones.

También te interesa visitar este video en el que Sergio de la Clínica H3 Serrano te explica 5 ejercicios específicos para la TENDINOPATIA DE ADUCTORES.

Bibliografía
  1. Renström P, Peterson L. Groin injuries in athletes. Br J Sport Med. 1980; 14:30-6.
  2. Jansen JA, Mens JM, Backx FJ, Kolfschoten N, Stam HJ. Treatment of longstanding groin pain in athletes: a systematic review. Scand J Med Sci Sports. 2008; 18:263-74.
  3. Ekberg O, Sjoberg S, Westlin N. Sports-related groin pain: evaluation with MR imaging. Eur Radiol. 1996; 6:52-5.
  4. Hölmich P. Long-standing groin pain in sportspeople falls into three primary patterns, a “clinical entity” approach: a prospective study of 207 patients. Br J Sports Med. 2007; 41:247- 52.
  5. Rodriguez C, Miguel A, Lima H, Heinrichs K. Osteitis pubis syndrome in the professional soccer athlete: a case report. J Athl Train 2001; 36:437-40.
  6. Mens J, Inklaar H, Koes BW, Stam HJ. A new view on adduction-related groin pain. Clin J Sport Med 2006; 16:15-9.
  7. Cowan SM, Schache AG, Brukner P et al. Delayed onset of transversus abdominus in long-standing groin pain. Med Sci Sports Exerc. 2004;36:2040-5.